Navegaba el sábado por internet, buscando imágenes del lugar donde se levantaban las Torres Gemelas, encontré este sitio que realmente me impactó, demás esta decir que no sólo por la definición de las imágenes, también el ángulo de la primer toma la vuelve imponente, sentimientos contradictorios me invadieron.
Sentí por un lado que las torres representaban la grandeza del hombre, entre 1972 y 1973 fueron los edificios más altos del mundo, cada torre tenía 110 pisos, elevándose desde el nivel de la acera 411 metros, su estructura, a diferencia de los edificios convencionales, se conformaba con sus paredes exteriores que llevaban la mayor parte del peso y las únicas columnas interiores estaban en el centro, que además contenían a los ascensores. Su basamento es otro aspecto innovador y único. Si quieres seguir leyendo sobre estos aspectos ve a La construcción de los Torres Gemelas.
Por otro lado ver en la primer fotografía de ese sitio los dos basamentos de las torres, me produjo una gran desolación, no sólo por las vidas que se perdieron, pensé es un símbolo de la capacidad de destrucción del hombre. Sea por cuestiones religiosas, sea por auto-atentado como sugieren otros, en ambos casos sería la ambición irracional la que desemboca en estos hechos.
La mayoría de nosotros sólo tiene datos a través de los medios de comunicación masivos, nos transformamos en meros espectadores o víctimas inocentes de estos hechos, sin embargo nos conmueven, podemos ignorar todas estas cuestiones porque acontecen lejos, porque no tenemos nada que ver, y podría seguir enumerando razones ... pero tiene que ser una invitación a la reflexión.
Este 11 de septiembre de 2010, a las 8,46 hora de Nueva York, como todos los años desde aquel 11 de septiembre de 2001, cuando se produjo el primer impacto de un avión contra las Torres Gemela, la población guardó un minuto de silencio, mientras que en toda la ciudad doblaron las campanas de las iglesias y nuevamente se leyeron los 2.752 nombres de las víctimas del atentado.
Que podemos hacer para que las guerras no sean el único camino para resolver diferencias, donde el más fuerte puede, y de hecho lo hace, imponer su visión. Sabemos que es negocio para los fabricantes de armas, porque entonces seguir argumentando en favor de la violencia que sólo destruye vidas inocentes de niños, ancianos, mujeres, hombres. Propongo trabajar para una convivencia pacífica y enriquecedora desde el lugar que nos toca estar, pequeñas acciones diarias hacen diferencias.
Esa imagen de los basamentos de las torres, desde lo alto, es un ícono de la contradicción que todo humano atraviesa, alcanzar tu plenitud desde la grandeza o por el contrario desde la violencia y / o intolerancia, en nuestras manos esta cómo queremos vivir con otros. Elijo el diálogo y la empatia, elijo trabajar para una sociedad más justa y donde todos tengan voz y el derecho a ser feliz.
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