Por alguna extraña razón no he encontrado tema para apuntar aquí. Se me ocurre pensar que tiene que ver con la época del año, donde uno sin quererlo quizás, se vuelve para adentro, mirando lo hecho, y reflexionando sobre ello.
Sin embargo siento necesidad de mantener un contacto con cierta periodicidad, porque entiendo que así se construyen los vínculos, dando señales por donde uno anda, y para atender a mi silencio interno de estos días, y satisfacer mi necesidad de seguir en contacto, para esta entrada traigo dos vídeos que me impresionaron gratamente.
El primero contiene una serie de reflexiones, simples y atinadas, mira.
El segundo, otra serie de reflexiones, pero aquí referidas a aquellas cosas que tenemos que dejar ir, muchas veces conservamos recuerdos oxidados, que ni nosotros mismos comprendemos porque aún seguimos cargandolos.
A veces sólo podemos mirarnos, sólo podemos dar muy poco de nosotros, y no necesitamos dar explicaciones, que ni para nosotros tenemos, porque hay cosas que suceden sin ser demasiados conscientes de ellas y necesitamos tiempo y silencio para acomodarlas y seguir.